Pesquisas preliminares determinaron que la acción se planeó a partir de un coche cargado de explosivos y un comando suicida que viajaba en una camioneta, los cuales detonaron simultáneamente.
Un anuncio de la policía se refiere a 45 muertos y casi 150 heridos, pero fuentes independientes afirman que el conteo asciende a 57 víctimas fatales, siete de ellas policías, y 145 heridos.
Acorde con la versión policial, un comando suicida reunió alrededor de su camioneta a varios jornaleros a los cuales ofreció empleo durante el día, una actividad que suele efectuarse en el sitio, la Plaza Tayaran.
Medios en el lugar dijeron que decenas de cadáveres yacen en los alrededores de la plaza, cubiertos con papeles y en espera de la llegada de los vehículos que los transportarán a la morgue para ser identificados por sus familiares.
La policía dijo que varios establecimientos sufrieron daños de consideración por la magnitud de las dos deflagraciones.
En tanto, un portavoz presidencial aseguró hoy que el ex presidente iraquí Saddam Hussein será ejecutado de "forma expedita y sus restos sepultados en un lugar incógnito" tan pronto se confirme la sentencia de pena capital que le fuera impuesta días atrás.
Otras dos personas, Barzan al Tikriti y Awad al Banda, colaboradores del depuesto mandatario, fueron condenados también a muerte, en el proceso por el fallecimiento de varias decenas de personas en la localidad de Dujail, sur del país.
El proceso contra Hussein se alargó durante meses en medios de alegaciones de falta de garantías para sus defensores e, incluso, el dictamen de una comisión internacional en el sentido de que su arresto fue ilegal.
Hussein y otros de sus colaboradores también están acusados de haber matado a centenares de kurdos en la ciudad septentrional de Jalaba, tras un levantamiento de ciudadanos iraquíes de esa etnia.