Recibió el Corazón Púrpura antes de morir
Por José A. Delgado / jdelgado@elnuevodia.com
WASHINGTON - El militar Xhacob Latorre, de origen boricua, murió en un hospital de San Antonio (Texas) un día después de haber sido condecorado con la Medalla del Corazón Púrpura por su participación en la guerra de Afganistán, según su familia. No está claro, sin embargo, si el soldado, que estaba fuertemente sedado como parte del tratamiento al que estaba sometido desde hace cuatro meses, entendió lo que sucedió a su alrededor, en sus últimas horas de vida. "Espero que haya escuchado", dijo Carmen Lasalle, tía del soldado de 21 años, quien era residente de Waterbury (Connecticut) y antes de haber participado en la guerra de Afganistán estuvo asignado al conflicto en Irak.Lasalle indicó que su sobrino resultó gravemente herido el 10 de agosto en la provincia afgana de Helmand, como consecuencia de la explosión de una bomba y en momentos en que realizaba un patrullaje a pie.Sus dos piernas resultaron seriamente dañadas, a tal punto que más adelante hubo que amputarlas. El otro militar que le acompañaba en el patrullaje murió al instante.Tras el accidente, Xhacob fue hospitalizado en el Centro Médico Brooke del Ejército, en San Antonio.Lasalle, quien ayudó a su hermana a criar a su sobrino, indicó al diario "Hartford Courant" que a Xhacob le sobreviven su esposa Frances y su hijo Javier, de sólo un año y medio.Daniel Latorre, de 23 años, acompañará los restos de su hermano Xhacob, que serán llevados mañana a Connecticut. El funeral ha sido programado para el 17 de diciembre.Lasalle indicó que en las últimas semanas sus familiares más cercanos habían ido al hospital a despedirse de él, pues ya se conocía que era improbable que pudiera sobrevivir sus heridas. Ella hizo lo propio durante la semana del Día de Acción de Gracias.Xhacob, a quien desde pequeño le fascinaba hacer chistes, intentó, hasta el último momento, que sus familiares no estuvieran tristes a pesar del incierto futuro a que se enfrentaba."Uno podía estar triste, llorando, pero él buscaba la forma de hacerte reír", señaló su madre, Nicolasa Lasalle.