...LA GUERRA ES LA ANTITESIS DE LA PAZ Y NOSOTRAS LUCHAMOS POR LA PAZ...

13 de mayo de 2007

En batalla contra el engaño y la falta de información

Existen más de 300 trastornos por los cuales descalificar a un aspirante a soldado, y los jóvenes que firman contrato con el Ejército antes de graduarse de cuarto año tienen 365 días para arrepentirse.

La divulgación de esa información, que raras veces se revela, forma parte de la misión que se impuso Sonia Margarita Santiago Hernández, fundadora de la organización Madres contra la Guerra.

La doctora en sicología fue activista en contra de la guerra en Vietnam cuando estudiaba en la Universidad de Puerto Rico. "Me di cuenta de que el planeta no puede sostener guerras porque crean mucho caos, mucha matanza", expresó.

Santiago Hernández crió a sus cuatro hijos hacia una cultura de paz y no compraba juguetes bélicos. Aún así, uno de sus vástagos se enlistó a los 22 años con el fin de saldar sus préstamos estudiantiles. Su hijo, ahora de 30 años y soldado inactivo, fue a Afganistán y regresó con osteoporosis y síndrome post traumático del estrés. A sus 30 años, tiene 50% de incapacidad.

"El hijo que se va a la guerra no es el mismo que regresa. Aquél muchacho alegre, lleno de vida y con amigos, usualmente cambia de carácter y de personalidad y puede estar esquivo, retraído, huraño, con pocos amigos", declaró la mujer.

Para evitar que otros jóvenes se enlisten y pasen por lo mismo, Santiago Hernández decidió volver a convertirse en activista en contra de la guerra. Ha logrado crear una red de médicos y sicólogos que ayudan a jóvenes y familiares, y ha obtenido el respaldo de la organización estadounidense "Military Families Speak Out". Estos, a su vez, tienen un acuerdo con el equipo de trabajo en ley militar "Military Law Task Force". "Hemos rescatado de las garras de la milicia a jóvenes puertorriqueños que se han ido bajo engaño", sostuvo Santiago Hernández.

Entre las personas que ha ayudado, recordó a un joven guaynabeño con miopía severa y pie plano cuyo que fue aceptado en el Ejército a pesar de que esas condiciones eran causas para rechazarlo. Su reclutador no le informó esto. Para más información puede llamar 787-796-2177.

Por: Mildred Rivera Marrero / END