Una enorme marcha contra la guerra en Irak, de más de 350,000 personas, tuvo lugar el pasado domingo en Manhattan, ciudad de Nueva York; concentración que es reflejo del creciente malestar en grandes sectores de la sociedad estadounidense por los efectos devastadores de dicho conflicto. Precisamente se celebró el último día de abril, mes que registró la pérdida de 70 soldados norteamericanos, el más alto saldo de muerte entre dichas tropas en cinco meses, cifra que alcanza ya los 2,400 soldados muertos. Las víctimas fatales entre la población iraquí se cuentan por decenas de miles, en las múltiples matanzas indiscriminadas que allí ocurren a diario. Por otro lado, se anuncia que los costos de la guerra en Irak y Afganistán, ya sobrepasan los $810 billones, según un informe del “Congressional Research Service” de Estados Unidos, el cual revela la preocupación del Congreso por los crecientes costos de dichos conflictos. Por su parte, el presidente de ese país, George W. Bush, se ha negado consistentemente a fijar una fecha para la salida de las tropas de Irak, aún a pesar de que muchas voces autorizadas consideran la guerra como perdida. A todos esos factores se añade la revelación reciente, por parte de algunos medios de prensa, de que sólo 20 hospitales han sido construidos por firmas constructoras estadounidenses en Irak, a pesar de que se asignaron fondos para la construcción de más de cien. Esto apunta hacia un escándalo mayúsculo de corrupción con los fondos para la reconstrucción de Irak. En otras palabras, Irak se ha convertido en el foso profundo de la moral estadounidense ante el mundo, arrastrando la imagen de dicho país y de su gobierno a los niveles más bajos en su historia reciente.
Tomado de Claridad.
...LA GUERRA ES LA ANTITESIS DE LA PAZ Y NOSOTRAS LUCHAMOS POR LA PAZ...