Unos 1,000 activistas antibélicos marcharon pacíficamente en el centro de Denver la víspera de la Convención Demócrata, coreando "detengan las torturas, detengan la guerra. Por eso luchamos".
El activista Ron Kovic, un veterano de la Guerra de Vietnam que padece parálisis y cuya historia fue narrada en el libro y la película "Nacido el 4 de julio", encabezó la marcha en una silla de ruedas.
"Todo el mundo va a estar observando, y hoy marcharemos con dignidad y disciplina", dijo Kovic.
En un mitin antes de la marcha, la activista Cindy Sheehan le dijo a la multitud que poco ha cambiado desde que protestó durante un mes frente a la hacienda del presidente George W. Bush en Crawford, Texas, en el 2005.
"Ahora, tres años después, nuestro país sigue atascado en Medio Oriente. Estamos hablando de más guerra, más guerra fría, y Rusia y Georgia, e invadir Irán y Pakistán", señaló.
Algunos de los manifestantes portaban cabezas hechas de papel maché que representaban al presidente Bush, el vicepresidente Dick Cheney y la secretaria de Estado Condoleezza Rice.